El Imperio Final es la primera novela de la conocida saga de Nacidos de la Bruma escrita por el célebre escritor de fantasía Brandon Sanderson. Esta novela, que vio la luz en 2006, da comienzo a una de las sagas más completas de fantasía de los últimos años y que ha logrado cautivar a un gran número de lectores.

En esta novela se introduce un mundo oscuro y opresivo sobre el que el Lord Legislador ha mantenido el control absoluto durante mil años, junto con un original sistema de magia basado en el uso de diversos metales: la alomancia.

Vive entre sus páginas la historia de Kelsier, un «nacido de la bruma» capaz de utilizar las habilidades mágicas de varios metales. Su sueño es organizar una rebelión que derroque el tiránico régimen que mantiene oprimido al pueblo skaa. Unirá su camino al de Vin, una joven skaa con un gran potencial alomántico que anhela encontrar su sitio en el mundo. La rebelión, el sacrificio y la lucha por defender la libertad en un sistema, a priori, inquebrantable forman la trama principal de El Imperio Final.

Uno de los puntos fuertes del libro es el complejo desarrollo que Sanderson hace de sus personajes. Presentan motivaciones y sueños muy diversos y, a pesar de ello, establece un desarrollo lo suficientemente profundo como para que el lector sea capaz de sintonizar con las aspiraciones y los motores internos de cada uno de ellos. Así, aporta una ligereza especial a la lectura, pasando inadvertido el gran contenido descriptivo de sus escenas.

Scadrial, el mundo donde ocurre la historia, está bien detallado y ofrece un entorno cohesivo donde desarrollar su trama. Un sistema mágico único y unas reglas bien definidas que enriquecen y favorecen el conflicto y el avance argumental.

En contra de lo que puede llegar a ocurrir en otras de sus novelas, en El Imperio Final el estilo de escritura es muy sencillo, sin dejar de crear suspense y mantener el interés del lector en casi todo momento.

En mi opinión, aunque de comienzo lento, es una novela que acaba por proporcionar giros argumentales tan intensos que resulta complejo dejar de leer a partir de la mitad del libro. Por ello, con esta y con otras novelas de la saga he vivido dos periodos de lectura: una más detallada, lenta y curiosa en la primera mitad del libro donde se detalla el mundo, la magia, los personajes y el conflicto; y otra rápida (casi de una sentada) cuando comienzan a producirse los grandes giros argumentales.

Si te interesan los sistemas novedosos de magia, bien descritos, detallados y coherentes, aventuras, y una narración emocionante y épica, El Imperio Final es tu novela y El Pozo de la Ascensión y El Héroe de las Eras serán tus siguientes lecturas.